¿Cómo impacta la menstruación o regla en la adolescencia?
La regla suele impactar en el cuerpo de la mujer de forma contundente al igual que todos los otros cambios que aparecen en la adolescencia.
La menarquia, la primera menstruación, es uno de los tantos cambios hormonales que se evidencian en el cuerpo de las adolescentes; también engordan o adelgazan de forma abrupta, les aparece vello púbico, vello en la piernas, en las axilas, los pechos se agrandan, etc.
En lo que refiere a los cambios psicológicos, es interesante como cada adolescente va construyendo la imagen del cuerpo al inicio de su madurez sexual. Esta se irá configurando según la forma en que cada una viva estos cambios, como historice ese pasaje de niña a “señorita” en el cual lo incomprensible de la sexualidad irrumpe en el cuerpo de modo traumático. Por ejemplo lo que antes aparecía a modo de juego entre compañeros de sala, en la adolescencia suscita otras sensaciones y esas circunstancias de juego pasan a ser encuentros en los que se hacen presentes la seducción y la atracción sexual.
¿Qué preocupaciones pueden aparecer?
Las preocupaciones asociadas a la aparición de la menstruación suelen ser las mismas que aparecen en el contexto de la adolescencia porque giran en torno al cuerpo y a la irrupción de la sexualidad en ese momento de su vida. Por esta razón aparecen preocupaciones por los chicos, los enamorados, los compañeros y las compañeras del colegio, las salidas, los cumpleaños, la ropa, etc.
Además las reacciones ante los conflictos de esta edad suelen ser extremas es decir, puede que algunas chicas quieran salir a todas las fiestas y eventos de su salon y en cambio otras prefieran no salir ni a la esquina o, en lo que refiere a la ropa, puede que algunas elijan comprarse prendas que marquen sus curvas y otras prefieran usar polos enormes que no muestren nada de su silueta.
¿Cómo es recomendable que los padres acompañen este proceso?
Por lo general la compañía de ambos es importante, pero más la de una mamá, una hermana o una tía, alguien de sexo femenino de la familia que ya haya pasado por esa experiencia.
Es importante darles información y disipar todas las fantasías o temores que tengan respecto de lo que les pasa.
También es recomendable que los padres mantengan la calma ante los cambios que aparecen de forma abrupta, es importante que no se enojen ante las nuevas respuestas y circunstancias de sus hijas y las comprendan como parte de una transición.
En este contexto es bueno observarlas, intentar comprenderlas y estar atentos para evitar que se hagan presentes conductas que puedan implicar un riesgo para su salud, por ejemplo en el caso en que la preocupación por la comida sea excesiva, es importante consultar a un psicólogo que pueda orientar al respecto.